El Botox es unos de los procedimientos de  rejuvenecimiento  facial no invasivo, más utilizado en la actualidad.

Generalmente, se utiliza en la medicina estética para atenuar o eliminar  las llamadas arrugas de expresión, que se forman en el entrecejo, frente y las “patas de gallo” (zona alrededor de los ojos). El botox  una sustancia que se infiltra  a nivel  muscular y sirve para paralizar el movimiento.

El procedimiento de inyección de botox es relativamente  sencillo,  se limpia la zona a  tratar con alcohol, luego se le pide al paciente que gesticule para observar el movimiento de  la arruga, luego procede a infiltrar el botox en puntos específicos. La colocación de la sustancia no duele, pero puede provocar una sensación molesta al  inyectar, sin embargo se realiza con una aguja muy fina que no duele.

Los resultados óptimos se observan  a los 10 días después de aplicado. Se puede realizar un retoque en el caso que la paciente sienta que hay aspectos que se necesitan mejorar.

Cuidados post aplicación

Mantener una posición vertical durante 4 horas, se puede estar parado o sentado.
No realizar ejercicios por 24 horas.
No masajear la zona inyectada.